Canal del Gran Prior
El Canal del Gran Prior es sin duda la obra más antigua ejecutada en el río Alto Guadiana. Parece ser que su primitiva traza, realizada por Fray Fernando Rodríguez, data del siglo XVI. Más tarde será el restaurador de Argamasilla de Alba don Diego de Toledo quien, encomendando la obra al famoso arquitecto Juan de Villanueva, emprenda la canalización definitiva que evitaría inundaciones y dotaría al lugar de un medio seguro de suministro hidrológico.
Se trata de un proyecto de canalización para extender el riego en los terrenos situados entre Ruidera y Arenas de San Juan, aprovechando las aguas del Alto Guadiana, y así favorecer el desarrollo de estas tierras.
Antiguamente, su cauce se encontraba jalonado por numerosos molinos de agua, algunos de los cuales estuvieron en uso hasta principios del s. XX. Con el paso del tiempo, estos molinos han ido desapareciendo, no quedando en la actualidad ninguno en pié.
Con la construcción del embalse de Peñarroya, el canal cayó en desuso, siendo desmantelado por la Confederación Hidrográfica del Guadiana en la década de los ochenta del s. XX. Hoy sólo quedan algunos testigos de su existencia, entre los que se encuentra este tramo rehabilitado que surca la población.